La Ley del Mono o Ley número 20.898, permite regularizar una vivienda o una ampliación, realizando un trámite simplificado.
En este instrumento se establece el procedimiento para regularizar viviendas de autoconstrucción: viviendas con edificaciones realizadas por el propietario sin previo permiso de la municipalidad, pasando por alto los estándares de estabilidad, seguridad y habitabilidad.
Este reglamento legitima las obras de construcción que realizó el dueño de la propiedad y facilita los pasos para su regularización: permiso de edificación y recepción final. Ambos trámites se realizan al mismo tiempo y con beneficios al pagar los Derechos Municipales. Sin embargo, para realizar el procedimiento la vivienda deberá cumplir ciertos requisitos.